Durante la semana, de lunes a sábado, recibimos a los practicantes (pacientes) que concurren a su sesión de Equinoterapia. El equipo de trabajo luego de planificar la actividad y distribuir los roles se dispone a comenzar la sesión. Cada momento de trabajo está organizado de acuerdo a la discapacidad que presente cada practicante.
El caballo es el instrumento fundamental para realizar la tarea por todo lo que aporta desde lo técnico, por su movimiento tridimensional, como desde lo afectivo por la ternura que despierta en cada uno de los chicos. A esto se suma el equipo interdisciplinario que desde lo profesional con distintos juegos y actividades, promueve, estimula y despierta las posibilidades de cada uno.
Ellos son los motores de todo lo que uno puede llegar a dejar en la pista recibiendo a cambio una sonrisa, una palabra tierna, un gesto y una caricia. ¡Qué satisfacción poder terminar una sesión y ver sus caritas de felicidad! Muchas veces el trabajo es dificíl pero siempre hay una recompensa.
"Todos juntos somos el corazón de este proyecto sin el cual no podríamos vivir"
Agradecemos a cada una de la familias la confianza depositada en nosotros al poner en nuestras manos a sus queridos hijos.
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